Cuando Valencia era Epidrápolis (Origen del escudo de la Coordinadora)

Transcripción de artículo publicado en el Diario Levante EMV de 6 de junio de 2007, enviado por Antonio Giménez (Tono)

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Descubren una nueva denominación del siglo XVI asociada a la existencia demás de 10.000 pozos de agua H. G., Valencia

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El investigador y profesor de Geografía de la Universitat de València, JosepVicent Boira, ha localizado un libro del siglo XVI en la biblioteca de la Junta de Andalucía que añadiría una nueva denominación histórica para la ciudad de Valencia: Epidrápolis, un término proveniente del griego que traducido significa «ciudad fundada sobre las aguas».

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Este nombre se sumaría a otras denominaciones de mayor tradición como la Valentia romana, la Medina al-Turab -ciudad del fango- o la Balansiya de época árabe y laValencia del Cid o Valencia de Aragón. El nombre de Epidrápolis vendría justificado por la existencia murallas adentro de «más de 10.000 pozos».

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Así lo explica el cartógrafo sevillano Pedro de Medina (1549) en el «Libro de grandezas y cosas memorables de España» que incluye en una de las crónicas la referencia a Epidrápolis. Josep Vicent Boira, que en su haber como investigador tiene la localización en un archivo de París de los planos originales del Palacio del Real, dio a conocer este curioso hallazgo hace unas semanas durante la presentación de la exposición «El Agua Domésticada» del Museu d'Història. La referencia al agua es una constante en la historia de la ciudad fundada por los romanos en el año 138 a.d.C. sobre una isla fluvial del Turia.

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De hecho esta circunstancia inspiró el diseño de uno de los escudos de Valencia posteriores a la Reconquista, (origen del escudo de la Coordinadora de Moros i Cristians de Ciutat Vella) donde aparece la ciudad amurallada construida sobre un río. Sanchis Guarner hace mención en su libro La Ciudad de Valencia a este escudo, que estuvo en uso entre 1238 y 1320 y puede verse en lugares de la ciudad como una arquivolta de la puerta de los Apóstoles de la Catedral.

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Boira sugiere que el diseño de este escudo podría asociarse también a los numerosos pozos para el abastecimiento urbano que inspiraron a su vez el nombre de Epidrapolis. El investigador comentó que «sería interesante aprovechar el momento de proyección de la ciudad para recuperar este escudo que es muy evocador por sus alusiones al agua». «No se trata de sustituir al actual sino de complementarlos» , precisó.

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El motivo por el que el escudo de la ciudad sobre el agua cayó en desuso se desconoce, aunque Boira apunta que probablemente la Casa de Aragón acabó imponiendo su su señera. En el pasaje del Libro de grandezas y cosas memorables recuperado por Boira el autor asegura que por la abundancia de pozos Valencia era equiparable a las ciudades de la Antigua Grecia.

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La suciedad y la mala calidad del agua del Turia impedían a la población abastecerse del agua del río, por lo que la apertura de pozos fue durante siglos casi la única fuente de suministro. En el siglo XVIII se llegaron a contabilizar en la ciudad másde 20.000 pozos. La exposición del Museu d'Història refleja cómo a mediados del siglo XIX se propuso la introducción de un sistema moderno para el abastecimiento de agua a la población, dado que el de fuentes y pozos resultaba insuficientes. Así, en 1850, nació el abastecimiento de agua potable a la ciudad, 8 años antes que a Madrid, lo que permitió multiplicar la disponibilidad de agua de 10 a 50 litros por habitante, en la actualidad este índice se cifra en 500 litros por habitante.